AL PELO COMO CABELLO DE ANGEL EN CABINA TELEFONICA

Facultativos de Facultad

Tratado de Fauna y Flora en públicas y privadas (Tomo II)
Hola a todos, nos encontramos nuevamente en este espacio para reflexionar sobre todos aquellos animalitos que vemos deambular por los pasillos de nuestro recinto educativo, o que incluso se sientan al lado nuestro y no logramos decir con exactitud qué son. Hoy estudiaremos otro precioso ejemplar conocido como "alumnis estupidus ingenuos", cuyo nombre vulgar es "el-imbecil-que-no-entiende". Adentrémosnos entonces en la explicación.
Edad promedio: 20-26. Aunque creemos que no hay límite de edad, así que ¡a no desanimarse!, sí usted es más grande y quiere ser uno... entonces probablemente lo sea.
Alimentación en clase: No puede comer ni hacer nada que lo distraiga de la tarea educativa. Cada pequeña distracción puede implicar un retroceso en la explicación de horas. Incluso mascar un chicle puede perderlo para siempre.
Frases típicas: "ehmm...perdón, no entendí a qué se refería con..." (completar esta frase con el núcleo central de la clase, o sea, si estamos explicando fotosíntesis, tres minutos antes de la clase preguntará: "ehmm...perdón, no entendí a qué se refería con FOTOSÍNTESIS". Con la consecuencia obvia de retrazar la salida de los alumnos deseosos por un recreo, y de... quedar como un "alumnis estupidus ingenuos".
Lugar en el ecosistema aulístico: Cerca de alguien que entienda. Hasta que ese alguien se canse, y elija a otro.
Resultados obtenidos de la observación de comportamiento:
Logran una increíble capacidad de síntesis en sus preguntas. Ellos no escarban en conceptos que no entienden, ni intentan complicar el asunto con una beta difícil del tema. Ellos simplemente no entienden la generalidad. Ni lo particular. Pero no pregunta por ello, aunque cree estar haciéndolo.
Son los aliados naturales de los "alumnis egolatrus" convirtiéndose rápidamente en sus seguidores.
Hemos observado con asombro que se encuentran en todos los niveles universitarios. Estamos estudiando muy de cerca para intentar descrubrir cómo hacen.
También, como el alumnis estudiado en el tomo anterior, cita autores absolutamente irrelevantes. La diferencia está en que él no sabe que no tienen nada que ver.
Este hermoso, pero odiado ejemplar nos ha dado mucho para pensar... sobre todo nos hizo sentir pensantes y nos ha dado mucho para hablar.... mal de él.

Es por eso que un manual de fauna y flora no estaría completo sin el "alumnis estupidus ingenuos".

Esperamos que les sea fácil de reconocerlos con esta guía, y nuevamente los invitamos a completar con información que ustedes puedan proveernos mediante su observación.